En la madrugada llegue acompañada de un elefante rosa y volador, no cabía en ningun lugar, así que lo deje en la sala y lo cubrí con unas sabanas, no quiero que nadie lo vea ni que me cuestionen al respecto...
Al parecer mi improvisado funcionó de maravilla porque nadie me ha dicho o insinuado algo, yo solo me asomo a ver como esta... y sigue ahi tan rosa como anoche pero no quiere volar y no me sonrie... esta noche tendre que sacarlo a pasear y rogarle que no regrese conmigo que vuele muy lejos... porque los elefantes rosas me gustan mucho pero cuando dejan de reir y volar me hacen vomitar y caerme de rodillas, quebrar un par de portavelas y dormir en el baño....
3 comentarios:
Nomás cámbiale las baterías y ya.
dame de tu churro jajaja
saludos :)
..entonces tu no eres nada pendeja, uh?
dije lo siento, porque algunas veces creo que debo pedir perdon por creerlo.
me gusto este post, matarilerileron.
saluditos. =)
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